-Resultado engañoso. El 5-1 es totalmente injusto y engañoso. Los dos primeros goles llegaron en los dos primeros minutos y los dos últimos en los tres minutos de descuento. El Sporting tuvo momentos de buen juego entre el 2-1 y el 3-1, con una gran ocasión de Trejo como momento clave para estar hablando de otra situación totalmente distinta. Hubiese sido suficiente un empate para ver todo diferente, porque no sólo significaba sumar 1 punto, sino que conllevaba lógicamente evitar el +3 de un rival directo, que ahora se distancia. Lo único positivo del marcador abultado es que tal vez sirva para que todos los estamentos del club, desde el vestuario hasta los despachos, se pongan las pilas y se dejen a un lado las diferencias por el bien común del Sporting.
-Planteamiento. La idea de Preciado (pasar a De las Cuevas o Trejo al centro y que los dos actúen más cerca) me parece acertada; de hecho, de la conexión entre ambos surgió el único gol sportinguista. Sin embargo, creo que Carmelo no era la opción más idónea para el extremo zurdo. A ver si algún día se me logra ver a Castro y Cases (Rivera como alternativa según rival, marcador o estado de forma de los tres) en el centro del campo, con Muñiz y De las Cuevas por las bandas junto a Trejo, por detrás del delantero. Lo que ya no me gustó tanto fue la defensa titular y no lo digo por los dos tantos encajados al inicio, sino que ya no me gustaba cuando se empezó a apuntar esa alineación durante la semana. Eso sí, todo cambia cuando se va 2-0 en el minuto 3. Con esa y con cualquier línea defensiva. En cuanto a los cambios, esperaba que André Castro entrara por Carmelo para ayudar a Rivera y que Muñiz adelantara metros en busca de alguna opción de disparo, pero antes llegó el 3-1 y la elección fue otra.
-Las dos áreas. Es utópico que un equipo tenga éxito en el fútbol cuando tiene limitaciones en las dos áreas. Ahora, el Sporting es el equipo más goleado de la Liga, algo que supone un lastre decisivo, salvo que el equipo gijonés fuera una máquina de hacer goles, que no es el caso. La campaña pasada también se tuvo déficit realizador, pero acabar como tercer club menos goleado permitió compensarlo para firmar la gran segunda vuelta y acabar décimo. Por mucho que se sea un buen equipo fuera de las áreas, dentro de ellas es donde se obtienen los premios o fracasos. Y es que exagerando mucho, hasta el Barça -el mejor equipo de la historia dominando los partidos- lo pasa mal en esos pocos días en los que se le atraganta el gol o comete algún error atrás.
-Preciado, 54 puntos y varios fichajes. No diré nada nuevo sobre las expectativas de futuro y las necesidades del equipo. Quedan 54 puntos en juego y el Sporting debe sumar entre el 45% y el 50% para lograr la permanencia. Es un reto complicado pero habrá equipos a los que se le haga larga la campaña, mientras que el Sporting es un equipo de rachas al que le falta coger una buena. La solución, creo, no pasa por la marcha de Preciado, sino que se necesita sacar la casta y el orgullo, también la unidad de todo el sportinguismo, conseguir que El Molinón sea un fortín del que apenas vuelen puntos, y por supuesto fichajeS. Acabo con mayúscula para enfatizar que se requiere más de uno. Y veo difícil que lleguen, y encima que se acierte, debido al dinero que parece se quiere invertir y a las pocas horas restantes para que se cierre el telón del mercado invernal.
-R.Sociedad: Bravo, C.Martínez, M.González, I.Martínez, Estrada; Elustondo, Aranburu, Zurutuza (Markel, 8'), Vela (X.Prieto, 80'), Griezmann; Agirretxe (Ifrán, 61').
-Sporting: Juan Pablo: Damián, Gregory (Botía, 13'), Gálvez, Canella; Rivera, Cases (Muñiz, 46'); De las Cuevas, Trejo, Carmelo (Sergio Álvarez, 78'); Bilic.
-Goles: 1-0, Zurutuza (1'); 2-0, Zurutuza (2'); 2-1, De las Cuevas (46'); 3-1, Elustondo (75'); 4-1, Aranburu (90'); 5-1, Griezmann (93').
1 comentario:
patetico
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