1)
Dirigentes
del Sporting generan deuda
con su
gestión (la
deuda no se reduce, pese a contar -según el presidente-
con un director general reputado y repleto de contactos).
2)
La
gestión económica impide reforzar el equipo, pese a contar -según
el presidente- con un director deportivo que recorre miles de
kilómetros y visiona cientos de partidos.
3)
Dirigentes/empleados ¿cobran?
intereses como inversionistas de Scepovic (información
publicada en la prensa asturiana), mientras
los jugadores aseguran públicamente que se les debe dinero.
4)
Nadie
asume responsabilidades ni
hace autocrítica,
nadie comparece en rueda de prensa para dar explicaciones, nadie
dimite o es despedido.
5)
El club trata de acallar críticas (queja
formal a la LFP contra algún
medio
y
retirada de pancartas que no contienen insultos ni faltas de respeto)
6)
El
club pide inversores (la
prensa asturiana señala que la entidad necesita afrontar pagos con
urgencia por valor de casi 6 millones), pero las
acciones no se venden y la estructura se mantiene.
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