No lo llamen Cesc, digan Señor Fábregas

Si nunca he escondido mi debilidad futbolística por Cesc, entenderéis que hoy el post vaya dedicado exclusivamente a él. Mantengo que mereció el Balón de Oro 2007 porque aunque no tuvo flashes espectaculares como Kaká, sí tuvo una regularidad de 9'5 durante todo el año. En los resúmenes, jugadores como el brasileño parecen más grandes de lo que muestran, en cambio alguien que hace jugar a los demás y en muchas ocasiones lejos del área rival carece del protagonismo merecido. A mi juicio, sólo tiene una asignatura pendiente a nivel individual: ser ÉL mismo en la Selección, donde por distintas razones no ha conseguido alcanzar el nivel que exhibe con la camiseta Gunner.

Cesc ha sido, es y será el predilecto de La Cola de Vaca (únicamente tenéis que repasar el archivo y las distintas secciones). Su trayectoria futbolística ha ido paralela a la mía periodística. Muchos le reclamaban una actuación en un escenario como San Siro y en una competición como la Liga de Campeones para coronarlo. Tal vez esos mismos no se acordaban de su lección magistral ante la Juve de su mentor Vieira hace un par de campañas o de su partidazo en el Bernabeu cinco semanas antes, por no citar numerosos ejemplos más. Quizás ellos no eran plenamente conscientes de que lleva la batuta del Arsenal desde los 17 años y ahora es su auténtico líder con ¡20!.En Inglaterra lo adoran, allí lleva un par de años entrando en el podio de los jugadores más destacados de toda la Premier y en el Emirates entonan el "We have got Cesc Fábregas" a ritmo de la aria de Verdi ‘La Donna è mobile'. Este 4 es el eje de su equipo sobre el césped al tiempo que su líder más allá del tapete verde que acaricia el esférico cada vez que él es el autor de un pase.

En la primera mitad avisó con un disparo al larguero; en el minuto 86, uno de esos que duelen más, se consagró rompiendo al que muchos consideran el mejor centrocampista defensivo del mundo y colocando el balón donde el portero no podía alcanzarlo. Esta jugada, como es carne de resúmenes, saldrá en todo lados y por fin compensará sus miles de acciones meritorias que apenas tienen repercusión. Si eres centrocampista y enfrente tienes al Balón de Oro (Kaká), a uno de los mejores organizadores (Pirlo) y al perro de presa por excelencia del fútbol mundial (Gattuso), ¿cómo lo contrarrestas? En teoría sencillo, en la práctica muy difícil: jugando más y mejor al fútbol que ellos. Y Cesc, desde ayer Señor Fábregas, lo hizo en la ida y lo ha repetido en la vuelta.

Pd. Es especial que precisamente este post sea para Cesc, algo que entenderéis en el siguiente.