(Colaboración con www.golaverage.com)
1. Hace unos meses casi escribo
el siguiente texto. Era cuando ya se veía que al Sporting se le escapaba el
ascenso y que, como consecuencia de esto, la salida de Trejo empezaba a tomar
forma de necesidad. Entonces, reflexioné sobre su posible sustituto y acerca de
si la salida del argentino cambiaría el sistema de Sandoval. Trejo es
indiscutible en este Sporting, obviamente, pero el 4-3-3 que empleó
mayoritariamente el entrenador sportinguista no era el sistema ideal para
Trejo. Como tercer centrocampista, tuvo que realizar un esfuerzo enorme que le
pasó factura y estaba muy alejado de la zona donde podía ser diferencial. Y si
se le situaba más arriba, al escorarle a una banda, se perdía su influencia
desde la zona central e intervenía menos en el juego. Un dilema al que le faltó
una prueba como ‘falso 9', esa moda tan actual.
2. Pues bien, teniendo esto en
cuenta, añadamos un precedente. Sandoval ya tuvo que sustituir a Trejo en el
Rayo Vallecano. Lo hizo con una pieza totalmente diferente: Michu fue el
elegido para reemplazar al argentino. Se iba un jugador muy técnico, al que le
gusta amasar y conducir el balón, y que entonces se sentía más incómodo en
tareas defensivas. Llegaba en su lugar un futbolista que juega con menos
toques, al que no le preocupa entrar menos en juego porque incluso favorece su
capacidad de sorpresa llegando desde segunda línea, y que además se caracteriza
por abarcar mucho campo y ofrecer un gran despliegue defensivo.
3. Este precedente me hizo darme
cuenta de que tal vez Sandoval repitiera la fórmula. No me refiero a traer a
Michu, obviamente. Estoy hablando de suplir a Trejo con un jugador que ofrezca
otro rol y que se adapte mejor al 4-3-3 o al 4-2-3-1. Y precisamente uno de los
nombres que han sonado en los últimos meses podría encajar en este contexto que
explico. Hace un tiempo, abordé el asunto en varias conversaciones privadas, y
a los tres interlocutores les dije: si hay un jugador que se parezca a Michu en
España, ese es Óscar Díaz. Veo al jugador del Lugo de 9 (o ‘falso 9'), pero
creo que tal vez también podría jugar de enganche (o tercer centrocampista) por
detrás de un delantero dinámico, cuyos movimientos favorezcan que Óscar Díaz
sorprenda desde segunda línea. Exactamente el rol y las dos posiciones de Michu
en el Swansea. Como digo, son pensamientos que tengo desde hace meses, incluso
antes de que se vinculara al delantero del Lugo con el Sporting (un testigo me
escuchó la frase "tengo el presentimiento de que Óscar Díaz será el
sustituto de Trejo"). Desconocía entonces las intenciones de Sandoval de
ficharlo y desconozco ahora su idea sobre el posible rol que le asignará si
llega. Primero se tiene que cerrar el fichaje. Si esto se produce, y un milagro
no da al sportinguismo la alegría de la continuidad de Trejo (que podría
entenderse muy bien en el campo con Óscar), el tiempo responderá mis preguntas
y demostrará si mis reflexiones eran acertadas.